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"La huelga es contra la reforma laboral, sí. Pero fíjense que los antihuelga no defienden la reforma, sino que se centran en atacar a los sindicatos y al derecho de huelga. Y es que, tras aprovechar la crisis para comerse derechos sociales, algunos ven la ocasión para cobrarse otra pieza apetecida: los sindicatos.
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Sé que hay muchos descontentos con los sindicatos mayoritarios. Pero ahora no toca atacarlos ni defenderlos, sino pelear contra los recortes, los ya aprobados y los venideros, y pelear por las posibilidades futuras de acción colectiva, entre ellas la huelga. Porque no nos engañemos: la criminalización de CCOO y UGT no busca una renovación sindical, ni unas organizaciones más combativas, sino todo lo contrario: el modelo que nos proponen es el cuerpo a cuerpo entre trabajador y empresario, sin molestos intermediarios."
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Artículo completo aquí.
"Mientras podamos defender nuestros derechos laborales y civiles, hagámoslo. De lo contrario el mensaje desde la inmovilidad quedará claro: podéis hacer con nosotros lo que queráis.
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¿De verdad no hay razones para la huelga?"
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Artículo completo aquí.
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Y un párrafo y una pregunta del artículo de Olga Rodríguez en Periodismo Humano:"Mientras podamos defender nuestros derechos laborales y civiles, hagámoslo. De lo contrario el mensaje desde la inmovilidad quedará claro: podéis hacer con nosotros lo que queráis.
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¿De verdad no hay razones para la huelga?"
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Artículo completo aquí.
Sólo le quiero a decir a I. Rosas que existen organizaciones más combativas, a ver si las busca (como si estuvieron tan escondidas), que allí estamos, dándolo todo para secundar y solidarizar y radicalizar y llevar un paso más allá. Sin palabraría, con acción.
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