sábado, 21 de marzo de 2015

¿Para que sirve la poesía?

En el día (mundial) de la Poesía, os voy a contar una (pequeña) perversión. Una de las cosas que más me molestan cuando hablo de poesía en clase (pero supongo que tiene más que ver con mi incapacidad para transmitir que con otra cosa), es cuando los alumnos dicen: "Qué bonito" después de leer un poema. ¿Bonito? -les digo- ¿Bonito? ¿Qué significa "bonito"? ¿Interesante, revulsivo, tierno, combativo, solidario, necesario, fascista, cursi, cacofónico, vomitivo, cañero, intrigante, sombrío, doloroso, evocador, sinestésico...?

Pues bien, me tomo la revancha cuando en el temario llegamos al Romanticismo y leemos aquello de:

¿Qué es poesía?, dices mientras clavas
en mi pupila tu pupila azul.
¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas?
Poesía... eres tú.

Leemos el poema e, inevitablemente, alguien dice: "¡Qué bonito!".

Y aquí viene mi venganza. No podéis imaginar mi cochino placer cuando respondo, ceja en alto: "Sí, una pupila azul debe de ser bonita...".

Buenas noches.

No hay comentarios:

Publicar un comentario