El largo viaje del día hacia la noche, de Eugene O'Neill, o cómo la búsqueda de aquel instante de felicidad nos sitúa en el infierno. Frente a la alegría de estar, la tortura de recuperar aquel microsegundo de eternidad.
Cada vez más convencida de que el mejor teatro es el de la palabra...
No hay comentarios:
Publicar un comentario