viernes, 11 de abril de 2014

Cuento de terror

Érase una vez (ahorita mismo), en un lugar muy lejano (que pisamos), un grupo de gentes que limpió, preparó y sembró un huerto. Cada día, los chicos regaban y vigilaban los brotes. Pero esta acción contra el sistema le pareció fatal a las autoridades que decidieron arrasarlo y así lo hicieron.
 
Lugar: colegio Ignacio Zuloaga (distrito Tetuán, Madrid)
 
Es seguro que el excmo. ayuntamiento de Madrid tendrá normativas en contra del uso de espacios de su exclusiva propiedad (aunque estén abandonados) para plantar un huerto. Y mi pregunta es... ¿propiedad, lo público?
 
Seguro que es legal (y si no, se hace). También es verdad que es injusto. Profundamente.
 
También es seguro que era una hermosa, hermosísima idea.
 
Esta misma semana, la presidenta de la Junta de Tetuán, Paloma García Romero, afirmó que esto era una lección a los alumnos, para que aprendan que no se puede ocupar una parcela municipal sin permiso.
 
Perspectivas. Los padres, los maestros y los chicos estaban dando una lección de vida.
 
Deformación profesional: El galán que los cortaba / no cesaba de llorar (Romance del conde Olinos, anónimo)
 
 
Fotografías de la acción de la pala excavadora del ayuntamiento en el huerto...
 




Se ha creado una petición en Change. Gracias por la colaboración.

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