miércoles, 22 de agosto de 2012

Curso de la vida, de Hölderlin

También tú querías llegar más alto, pero el amor nos fuerza
a bajar a todos y el dolor nos dobla con mayor ímpetu,
mas no torna en vano
nuestro arco al punto en que partió.

¡Arriba o abajo! ¿Acaso no rige en la sagrada noche,
en la que la Naturaleza imagina en silencio días venideros,
incluso en el Orco más oblicuo
no rige un grado, una ley?

Lo sé por propia experiencia. Pues jamás vosotros, los Celestiales,
mantenedores de todo, me habéis conducido,
como hacen los maestros mortales,
con cuidado por caminos llanos.

Pruébelo todo el hombre, dicen los Celestiales,
para que, poderosamente nutrido, aprenda a agradecerlo todo
y comprenda la libertad
de partir hacia donde quiera.

Friedrich Hölderlin, «Curso de la vida», en Odas (traducción y notas de Txaro Santoro con un texto de Virginia Euri Careaga y una nota introductoria de Anacleto Ferrer), Madrid, Hiperión, 1999

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