Matadero occidental es una obra-frankestein, hecha de retazos imprescindibles y escondidos de esta nuestra sociedad posmoderna que toman vida en un grito que debe convertirse en revolución.

.....Pecios de nuestro naufragio: la soledad, la gestión del dolor, la incomunicación,  la indiferencia, el miedo, la publicidad que hablamos... La alienación. ¿En qué nos convertimos cuando creemos -tanto nos lo han vendido- que nuestros problemas son individuales, que sólo nosotros somos responsables den uestro dolor, que sufrimos porque no somos fuertes, porque no hemos sabido ni sabemos adaptarnos. No cabe la rebeldía. Es la culpabilidad personal, la inadaptación al medio, lo que que nos impide reconocernos pueblo... ¿De dónde viene la fortuna del barón Thyssen, por ejemplo, dónde van los mensajes que no queremos enviar?..

.....Cuando todo es susceptible de convertirse en gestión y espectáculo: el dolor, el sexo... ¿Debemos seguir callados? ¿Hasta cuándo? ¿Hasta dónde?

.....Se estrenó ayer y va a estar en la Sala Youkali (c/ Santa Julia, 11.  Metro Nueva Numancia) a las 20:30 horas de los viernes y sábados del mes de noviembre. No vayan ustedes a verla si son complacientes con el ¿actual? (¿acaso no ha sido así siempre?) estado de las cosas o temen ver representada cierta forma de conciencia o toma de posición...

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Algo así:

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Grupo de actores 1º

Vivo en tiempos sombríos.

En la noche de los tiempos.

Río para callar el hueco que deja la muerte que nos gobierna.

Hablo para jusificar una ausencia

allá donde sólo crecen huellas.

Me gano la vida vendiendo mi vida,

mi sueño, mis deseos,

la extensión única

de mi rostro.

Me dicen:

come, 

bebe,

diviértete,

folla,

mira,

termínate lo que tienes.

Y lo hago todo,

y todo lo hago.

Soy un buen ciudadano

desde que mis padres me parieron,

desde que mis profesores me alimentaron,

desde que yo mismo me devoro.