"Conjuro contra la picadura de culebra", Asturias

La serpiente maldita y la cierva
hicieron una apuesta:
a ver quién era la primera
en vestirse, calzarse y alcanzar la cima.
La cierva, bendita, fue más rápida;
la serpiente, maldita,
se metió por debajo de bonco-carronco
y fue a salir por debajo de la raíz
de fresno infeliz.
¡Que se le seque la boca
como se seca la estopa!
¡Que se le seque el corazón
como se seca el carbón!
¡Que se le seque la baba
como se seca la paja!

Raíz de Fresno infeliz. Una antología de poesía primitiva (edición de Martín López-Vega), Servicio de Publicaciones de la Diputación de Málaga, 2009.